El calendario es principalmente una herramienta de comunicación.

Al compartir tu calendario con tu equipo de trabajo, estos pueden ver cuándo pueden contar contigo, sin necesidad de llamarte o enviarte un mensaje. Es más fácil concertar una cita cuando de antemano sabes que es tiempo disponible de los participantes.

Usar el calendario como recordatorio de lo que tienes que hacer, es una mala estrategia, pues va en desmedro de ejercitar tu cerebro. La memoria del cerebro, al igual que los músculos, necesitan ejercicio. Si descargas tu memoria en computadoras, ipads, teléfonos, etc, entonces esa función de tu cerebro decaerá.

Es un buen ejercicio de memoria, en la mañana cuando llegues a la oficina recorrer mentalmente tus actividades planificadas y luego comparar este recorrido con tu agenda. Te ayudará a mantener una buena memoria.